San Pedro Garza García tiene una nueva obra monumental: la Niña Cangrejo, una escultura de 10 metros de altura que ya “vigila” la entrada del municipio por la Calzada San Pedro. Su diseño estuvo a cargo del artista oaxaqueño Sergio Hernández y rápidamente se convirtió en tema de conversación por su estilo único y el simbolismo que representa.

Niña Cangrejo Es Una Obra De Gran Dimensión
La escultura se ubica a la entrada de la colonia Fuentes del Valle, un punto de tránsito constante para habitantes y visitantes. Fabricada en bronce con una pátina roja, la pieza destaca por su tamaño y su singular diseño.
En el anverso, la figura muestra a la niña con dos tenazas sobre los ojos, simulando unos binoculares. Desde ese ángulo parece observar a quienes entran al municipio. En el reverso, la mirada se mantiene fija, sin las tenazas, con un gesto más calmado.
El costo de la obra fue de 8 millones 688 mil pesos. La pieza es una ampliación de una versión original de 70 centímetros que pertenece a la colección privada de la familia Fernández Zambrano.
El trabajo de ampliación se realizó en el taller del arquitecto Alejandro Velasco Mancera, en la Ciudad de México. Ahí se invirtieron cuatro meses en moldear y dar forma a la escultura monumental.
Un Proyecto Con Historia Personal
La instalación de la Niña Cangrejo tiene un trasfondo ligado al exalcalde Mauricio Fernández, fallecido en 2021. Desde antes de su última candidatura ya tenía la inquietud de colocar una obra en la entrada del municipio, y el proyecto finalmente se concretó años después.
Durante la inauguración, el alcalde Mauricio Farah explicó que Fernández siempre quiso que esta pieza diera la bienvenida a los sampetrinos y a quienes cruzan desde el área metropolitana. “Él tenía mucha ilusión de que la obra pudiera estar observando a toda la gente que entra al municipio”, dijo.
En el evento participaron los hijos del exalcalde: Alana, Vanessa, Maximiliano, Antón y Stefan Fernández. Este último pronunció un discurso en el que resaltó la amistad de su padre con el escultor Sergio Hernández, a quien describió como alguien con una visión artística fuera de lo común.
Para la familia, la Niña Cangrejo simboliza no solo un homenaje a esa relación, sino también un legado cultural para San Pedro. “La niña cangrejo para mí es un tributo a estas grandes personalidades”, expresó Stefan Fernández.

El Relevo De Una Escultura Emblemática
En el mismo sitio donde hoy se encuentra la Niña Cangrejo, durante décadas estuvo instalada una réplica de El David de Miguel Ángel. Desde 1967 hasta 2011, la figura clásica adornó el acceso de San Pedro.
Su retiro generó opiniones encontradas en su momento. Ahora, con la llegada de la nueva escultura, se abre un nuevo capítulo en la historia cultural del municipio. La propuesta, más contemporánea y abstracta, busca conectar con el presente y ofrecer un contraste con la tradición clásica.
Los vecinos que transitan diariamente por la Calzada San Pedro ya identifican la nueva pieza como un punto de referencia. La obra no solo adorna, sino que también invita a reflexionar sobre la visión artística que buscaba transmitir el exalcalde Fernández.
Niña Cangrejo Genera Opiniones Encontradas Entre Habitantes
La instalación de la Niña Cangrejo no ha pasado desapercibida. Por un lado, hay quienes celebran la llegada de una pieza contemporánea que aporta identidad y modernidad a San Pedro. Consideran que el municipio necesita símbolos propios que lo distingan de otras ciudades.
Sin embargo, también hay voces críticas que cuestionan el costo de la obra y su diseño poco convencional. Para algunos vecinos, la estética resulta extraña y distante de lo que consideran arte público tradicional.
El debate, más allá de lo estético, refleja la manera en que las comunidades reaccionan ante cambios en su entorno. En este caso, la Niña Cangrejo se convierte en un nuevo punto de referencia cultural, polémico pero inevitablemente llamativo.
Los organizadores de la inauguración señalaron que el objetivo es impulsar un mayor interés en el arte y fomentar el diálogo cultural en la zona metropolitana. “Es una pieza que busca observar y ser observada”, mencionaron durante el acto.
La Niña Cangrejo ya forma parte del paisaje urbano de San Pedro, y con el tiempo se verá si logra convertirse en un símbolo querido o en un tema de discusión permanente.