El mundo del regional mexicano vuelve a estar de luto. El cantante Ernesto Barajas, vocalista de Enigma Norteño, fue asesinado en Jalisco durante un ataque armado que también dejó un acompañante muerto y a una mujer herida de gravedad. La noticia conmocionó a los fanáticos y reabrió el debate sobre la violencia ligada al género de los narcocorridos.
Según versiones de testigos, el intérprete se encontraba a bordo de una camioneta en una pensión de autos en Zapopan, cuando dos hombres en motocicleta abrieron fuego contra él. Tenía 38 años y era originario de Culiacán, Sinaloa. Su muerte ocurre en medio de un historial marcado por amenazas y polémicas debido al contenido de sus canciones.
Las autoridades locales acordonaron el área del ataque y la Fiscalía De Jalisco abrió una investigación para dar con los responsables. Mientras tanto, en redes sociales, fanáticos y colegas expresaron su tristeza y recordaron al cantante como una de las voces más influyentes en la música de corridos.
La Carrera De Ernesto Barajas
Ernesto Barajas fundó junto a otros músicos la agrupación Enigma Norteño en 2004. El proyecto creció de manera vertiginosa hasta lograr más de cuatro millones de oyentes mensuales en Spotify. Su estilo, centrado en los narcocorridos, lo colocó en la cima del regional mexicano, pero también lo puso bajo la mira de distintos bandos criminales.
Entre sus temas más polémicos destacan ¿Van A Querer Más? (El Mencho), dedicada a Nemesio Oseguera del Cartel Jalisco Nueva Generación, y Los Placeres De Archivaldo, inspirada en Iván Archivaldo Guzmán, de la facción de Los Chapitos. También dedicó canciones a Ismael “El Mayo” Zambada y a La Mayiza, otro brazo del Cartel de Sinaloa.
En entrevistas, Barajas reconoció que intentaba “no ofender a otros bandos” al componer, consciente de que cualquier error podía costarle caro. Sin embargo, en agosto de 2023, recibió una amenaza directa del CJNG a través de una narcomanta, lo que lo obligó a cancelar un concierto en Baja California. La advertencia lo señalaba por supuestos vínculos con jefes del Cartel de Sinaloa.
A pesar de estas situaciones, el músico seguía llenando escenarios y manteniendo a su público fiel. Su estilo provocador, pero a la vez calculado, se convirtió en una firma de su carrera artística.
Amenazas Y Polémicas Recientes
El asesinato de Ernesto Barajas en Jalisco no puede analizarse sin recordar las tensiones que vivió en los últimos años. Apenas en marzo, el cantante Arley Pérez lo acusó de frenar su carrera por órdenes de Néstor Isidro Pérez Salas, alias El Nini, jefe de seguridad de Los Chapitos. La denuncia desató controversia en el medio musical y dejó a Barajas en medio de acusaciones difíciles de comprobar.
También pesaban sobre él constantes rumores de que su agrupación tenía lazos con el crimen organizado. Aunque siempre lo negó, el propio cantante admitió que capos lo habían buscado para componer corridos a medida. En más de una ocasión confesó que la línea entre su música y la violencia real era cada vez más delgada.
El ataque en Zapopan refuerza la percepción de que los músicos de narcocorridos viven en un entorno marcado por riesgos. Los escenarios, las giras y hasta sus redes sociales estaban expuestos a disputas entre cárteles, lo que convierte a estos intérpretes en figuras vulnerables.
A esto se suma que Enigma Norteño se convirtió en una de las agrupaciones más escuchadas de su género. Su alcance internacional y su estilo directo hicieron que tanto seguidores como detractores pusieran la mirada sobre cada movimiento de la banda.
Su Legado En La Música Regional Mexicana
La muerte de Ernesto Barajas no solo deja un vacío en su familia y en Enigma Norteño, sino en toda la escena del regional mexicano. Con más de 20 años de trayectoria, logró consolidarse como uno de los referentes del género, pese a las controversias que rodearon su carrera.
Además de cantar, Barajas exploró otros formatos. En YouTube conducía un Pódcast en el que entrevistó a artistas como Carín León, Gabito Ballesteros y Eduin Caz, de Grupo Firme. Este espacio le permitió conectar con un público más amplio y mostrar una faceta diferente, enfocada en la conversación y el entretenimiento.

Los seguidores lo recuerdan como un artista apasionado, con una voz que marcó una época. Su asesinato abre un debate sobre la relación entre la música de corridos y la violencia en México, un tema que sigue generando opiniones divididas.
El crimen también pone de nuevo bajo la lupa a Jalisco, estado que en los últimos años se ha consolidado como un epicentro de la violencia ligada al narcotráfico. Para muchos, la muerte del cantante es un reflejo más de la inseguridad que viven artistas y ciudadanos por igual.
La investigación sobre el ataque continúa abierta. Sin embargo, para los fanáticos, el legado de Barajas ya está escrito: una voz fuerte, polémica y fiel a su estilo, que difícilmente será olvidada.